“Una vieja zorra. Sus composiciones se limitan a canciones sobre rubias muertas”, dijo Keith Richards sobre Elton John. Sir Reginald respondió con crudeza: “Es patético. Como un mono con artritis… es un imbécil”. Las dos estrellas británicas se han dedicado lindezas de este estilo durante décadas. Públicamente. El combate verbal, que hoy está en punto muerto, podría reavivarse en cualquier momento.
No es un secreto que Keith Richards tiene una lengua viperina y que nunca le ha importado manifestar públicamente sus opiniones, sean las que sean. Algunas veces, incluso ha lanzado sus dardos envenenados a su propia banda. Pero también ha tenido en el punto de mira, y ha sido enormemente despiadado, a grandes estrellas del rock como David Bowie (“Todo es pose. Todo es jodida pose. No tiene nada que ver con música. Por supuesto, él lo sabe”), Prince (“Es un enano sobrevalorado”), Oasis (“Estos tipos son odiosos”) o Elton John, entre otros.
Mientras muchos de los destinatarios de sus críticas e insultos, decidieron ignorarle, el ‘Rocket Man’ optó por entrar al trapo. Él también jugaría y le daría a probar su propia medicina. Durante más de tres décadas, las dos leyendas de la música inglesa han protagonizado una incansable contienda verbal y pública. Ambos han manifestado sus diferencias creativas y personales… a veces de forma cruenta. Durante la feroz disputa, Elton John alimentó el fuego cuando, en una entrevista de radio, dijo que los Stones eran “un grupo irrelevante”.
El revulsivo podría remontarse a julio de 1975, cuando The Rolling Stones tocaron en Colorado ante 40.000 personas y preguntaron a Elton John, que casualmente estaba por allí, si quería tocar con ellos una canción, Honky Tonk Women. El episodio lo contaba Elton en su autobiografía, 'Me': “Entonces, yo estaba hasta arriba de cocaína y eso me daba demasiada confianza en mí mismo. Todo lo que tenía que hacer era salir, tocar (el teclado), saludar al público y marcharme. En lugar de eso, decidí que lo estaba haciendo tan bien, que tenía que quedarme y seguir tocando junto al resto de la banda. Por un momento, pensé que Richards me miraba porque estaba impresionado con mi brillante contribución improvisada”.
“Después de algunas canciones, finalmente llegó a mi cerebro que la expresión de su cara no se correspondía con lo que yo apreciaba", continúa relatando John. “Rápidamente, me escabullí, notando que, mientras me iba, Keith seguía mirándome de una manera que sugería que ya hablaríamos después. Decidí que lo mejor que podía hacer era no quedarme a la fiesta 'after-show".
Quizá fue ese día, cuando Elton John quedó señalado. Pero la primera evidencia de la animadversión que sentía el guitarrista hacia el cantante fue en 1988. En una entrevista con ‘Rolling Stone’, le pidieron opinión sobre una de las canciones top del año, que resultó ser I don’t wanna go on with you like that de Sir Elton. Y esto es lo que respondió Richards: “Reg, regálame un Rubens y diré algo bonito. Reg Dwight. Tipo adorable, pero pura pose”. Es verdad que también remarcó que no era su intención atacar personalmente a Elton y que estaba siendo relativamente educado para lo que era habitual en él. No esperaba que sus comentarios suscitaran una respuesta de su compatriota.
Keith traspasó la línea roja en 1997, tras el fallecimiento de la Princesa Diana, cuando en ‘Entertainment Weekly’ le preguntaron por ‘Candle in the Wind 1997’. Recordamos que el primer ‘Candle’, el de 1973, era una elegía musical para Marilyn Monroe. La versión del ’97, está dedicada a Lady Di. El músico, antimonárquico, respondió: “Una vieja zorra. Sus composiciones se limitan a canciones sobre rubias muertas. Pero era un amigo personal (de Diana) después de todo. Yo encontraría difícil subirme a la ola de algo así, pero Reg es espectáculo”.
Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío. Y tras el incidente ‘Candle’, John no pudo quedarse callado. En una entrevista de 1997 con New York Daily News, respondió con crueldad. “Me alegro de haber salido de las drogas y el alcohol. Hubiera sido terrible ser como Keith Richards. Él es patético, pobrecillo. Es como un mono con artritis, intenta salir al escenario y parecer joven. Siento un enorme respeto por los Stones, pero ellos podían haber sido mejores si hubieran echado a Keith hace 15 años… pienso que es un imbécil y lo pienso desde hace mucho tiempo”.
En la misma entrevista, Elton también explicó por qué encontraba inmensamente hipócrita que Richards le hubiera catalogado de ‘espectáculo’. “Por favor, si los Rolling Stones no son espectáculo, entonces ¿qué son?. Ya sabes, con esas mujeres desnudas inflables”. John hacía referencia a la figura de las mujeres gigantes desnudas que adornaban el escenario de la gira Bridges to Babylon de 1997.
Aun así, curiosamente, en los Premios GQ 2015, los dos ‘enemigos’ fueron fotografiados sonrientes y parecía que mantenían una jovial conversación. Es difícil saber si la animosidad entre las dos estrellas es solo una pantomima o si realmente hay un nivel de odio genuino que se ha gestado en lo más profundo.
En 2018, durante una entrevista con The Daily Telegraph, Richards declaró que no iba a echar de menos a Elton John cuando su gira de despedida hubiera concluido (termina en Estocolmo el 8 de Julio de 2023). “Después de tres años de gira, tú también querrías retirarte. Confío en su palabra”. Y añadió que cuando John se retire… ¡Habrá más espacio para nosotros!”.
Fuente: los40.com